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Condenan a seis años de cárcel a los dueños de "la tienda de los horrores" por maltrato animal

2023-02-09 12:05:16

Los propietarios de una tienda de mascotas de Valencia han sido condenados a seis años de prisión por delito de estafa, falsedad documental, pertenencia a grupo criminal y maltrato animal. Esta es, por tanto, la mayor condena por maltrato animal impuesta en España hasta el día de hoy. Este local era llamado “la tienda de los horrores”.

El juzgado de lo Penal número 9 de Valencia ha condenado a tres de los dueños de esta tienda que traían cachorros desde Eslovaquia en muy malas condiciones. De hecho, muchos perros murieron por las pésimas condiciones en las que se encontraban.

Además de la pena de prisión, los propietarios del local de los horrores han sido condenados a “inhabilitación especial para el ejercicio de profesión, comercio u oficio que tenga relación con los animales, así como para la tenencia de estos durante tres años y tres meses”. Los tres condenados tienen más establecimientos de mascotas en la Comunidad Valenciana.

Aparte del viaje en pésimas condiciones y según se puede observar en la sentencia, los animales no “guardaban cuarentena al llegar a la tienda y eran puestos a la venta, ocultando a los clientes su procedencia y su edad real, porque los tres eran sabedores, por venir dedicándose a esta actividad desde mucho tiempo antes, de que los clientes querían perros nacionales y de pequeño tamaño”.

A los clientes se les entregaba una cartilla de vacunación en la que los condenados “por orden de los acusados, pero con su firma profesional, o incluso los empleados vendedores por orden, igualmente, de aquellos, consignaban por escrito una edad que no era la que constaba en los pasaportes eslovacos que habían venido con los perros, que eran realmente de edad inferior a la real”.

Los vendedores de los animales necesitaban que los perros estuvieran registrados con mínimo tres meses para poder hacer un viaje internacional y tener las vacunas pertinentes.

“Los perritos, que no llegaban a la tienda debidamente vacunados y desparasitados, eran almacenados en ella hacinados en vitrinas o boxes de dimensiones insuficientes para el número de cachorros que albergaban y para el tamaño de los mismos, y tenían lechos de serrín o papeles que no eran aptos para absorber los frecuentes vómitos, orines y heces de los mismos porque, en un gran número, desarrollaban allí mismo y antes de ser vendidos, síntomas de las enfermedades que padecían desde su llegada, como corona virus, parvo virus, moquillo o tos de las perreras” dictamina la sentencia.

El inmueble que alberga la tienda no disponía de las dimensiones necesarias para separar y aislar a los animales que caían enfermos para evitar así el contagio, como ocurrió. Esos contagios provocaron la muerte de muchos cachorros.